Los senderos de Textiles Pigüé
En el marco de la celebración de los 14 años, los trabajadores de la empresa recuperada le pusieron nombre a tres calles internas del predio que ocupan en el parque industrial de la localidad del sudoeste bonaerense.
El martes 20 de febrero los trabajadores de la Cooperativa de Trabajo Textiles (CTP) convocaron a la comunidad de Pigüé a conmemorar el 14 aniversario de la conformación de la Cooperativa. También se contó con la presencia de dirigentes gremiales y sociales, así como trabajadores cesanteados por la empresa Dass de Coronel Suárez, y funcionarios del Ejecutivo y Legislativo local.
La ocasión fue propicia para bautizar las tres calles internas del predio que ocupa la CTP en el acceso a la localidad de Pigüé. El Consejo de Administración eligió tres fechas significativas de la historia de los trabajadores relacionadas con sus consignas históricas de ocupar: el 20 de febrero de 2004 se constituía formalmente la CTP; resistir: el 12 de agosto de 2004 efectivos policiales reprimían a los trabajadores que ocupaban la fábrica y los desalojaron; y producir: el 22 de diciembre de 2004 se sancionaba la Ley de Expropiación que les daría las condiciones para el desarrollo económico y social.
Asimismo, coincidiendo con el primer aniversario del lanzamiento de la marca propia “Fibra. Resistencia en Movimiento” inauguraron un salón de exposiciones y venta de prendas deportivas dentro del complejo.
Las palabras
En primer término se dirigió a los presentes el presidente de la CTP, Marcos Santicchia, quien luego de agradecer la presencia de la comunidad, planteó la difícil situación que vive la industria nacional por las políticas públicas que lleva adelante el gobierno de Mauricio Macri.
“El gobierno de la Alianza Cambiemos no ha favorecido a la cooperativa ni a la industria en general. Al contrario, la ha afectado”, aseveró Santicchia quien además reclamó por los incrementos en los servicios de energía eléctrica y gas con una caída de la demanda para la producción en el rubro textil del orden del 30 por ciento.
“Cualquiera cierra una fábrica porque es ineficiente, pero no cualquiera se hace cargo de 500 personas que quedan en la calle. Textiles Pigüé sí se hizo cargo. No se hizo cargo el Estado”.
El presidente de la Cooperativa aseguró que “estamos pasando momentos difíciles pero dentro de la cooperativa no tenemos miedo de perder el trabajo”, en alusión a la fuente laboral de los 120 integrantes de la cooperativa.
Por su parte, el director Francisco Martínez aseguró que hace muchísimo tiempo que desde la cooperativa se subraya que el mercado jamás va a indicar la suerte de los trabajadores de la cooperativa.
“Este acto está dedicado a la lucha de todos los espacios gremiales y sindicales”, enfatizó Martínez e instó a comprometerse a poner todo el esfuerzo necesario en abrirle el espacio a los trabajadores para contener lo que denominó como “una cacería a la industria nacional”.
Detalló el cooperativista que los fuertes incrementos en los servicios de gas y energía eléctrica imposibilitan incorporar nuevos trabajadores a la CTP. Mostró así las boletas y dijo que Textiles Pigüé pasó de pagar $ 29 mil de gas a pagar $ 227 mil, y de $ 80 mil de energía eléctrica a abonar 450 mil.
Participaron luego con su saludo y un reconocimiento a la lucha de los trabajadores textiles el secretario general del gremio municipal local, Néstor Batista, y la dirigente de Suteba, Valeria Visovsky.
Por último, Adriana Barrionuevo, despedida de Dass en Coronel Suárez -quien impulsa con otras trabajadoras la creación de una cooperativa de trabajo para confeccionar inicialmente ropa para la policía local como salida a la desesperante situación que viven los obreros de la textil suarense-, pidió que las autoridades políticas estén a la altura de las circunstancias.
Tres hitos en la historia de la CTP
Calle 20 de febrero de 2004
Luego del abandono empresario y posterior paralización de las actividades productivas en GATIC, los trabajadores de la empresa, acompañados por el Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas (MNER), deciden conformar una cooperativa, atentos a ocupar la empresa y mantener su fuente de trabajo.
La asamblea de obreros, realizada en esta misma planta, aprobó su primera comisión directiva siendo Daniel Moro el primer presidente que tuvo Textiles Pigüé.
Se iniciaba así el camino de la autogestión con valentía para ocupar, proponiéndose ser actor fundamental en la economía social y solidaria, produciendo para generar riquezas y distribuir equitativamente.
Calle 20 de agosto de 2004
Luego de la ocupación de la fábrica, apareció la resistencia, que fue heroica por parte de los trabajadores y vecinos que acompañaban y denunciaban el operativo represivo.
Más de 200 efectivos policiales desalojaron a los trabajadores después de 20 horas de tensión y violencia. La presión política, gremial, empresaria y mediática más el desinterés de la comunidad que no estaba debidamente informada de la estafa que los trabajadores denunciaban, lograron que se lleve a cabo en nuestra ciudad la más alta represión a obreros, sino la única de toda su historia.
Finalmente los trabajadores fueron desalojados, prometiéndose éstos volver, insistiendo en sus reclamos, logrando poder reunirse con el señor presidente de la Nación, el compañero Néstor Carlos Kirchner, quien terminó jugando un rol importante, en cuanto a la decisión política, favoreciendo esto a los ex empleados de GATIC
Calle 22 de diciembre de 2004
La solución sería la Ley de Expropiación, la número 13.289, conseguida sobre el final de ese movido año. Las cámaras de Senadores, primero, y Diputados, posteriormente, votaron favorablemente para luego ser promulgada, sin firma, en enero de 2005, por el ingeniero Felipe Solá, entonces gobernador de la provincia de Buenos Aires.
Se comenzaba, ahora sí, definitivamente y para siempre, el camino de la autogestión, con una clara misión en cuanto generar trabajo para la inclusión social y una visión de desarrollo que permite armar los escenarios más favorables para los trabajadores desocupados de esta ciudad, y de todo el país y del mundo.
Para ello, ayer, hoy y siempre, con inteligencia y eficiencia para producir.
Él y ella
(Por Walter Ditrich)“Lo único que te puedo decir es que el camino es duro, pero vale la pena”, le dijo el socio fundador de Textiles Pigüé a la trabajadora despedida de Dass. Ella, dice que prefiere estar con su guardapolvo frente a la máquina de coser. Pero la dejaron en la calle.
A él le pasó lo mismo hace casi 15 años. Ella dice que “por la dignidad del trabajo me obligaron a luchar”. El ya transitó parte de esa ruta. Una noche, en una reunión en el Centro de Jubilados, cuando se propuso crear una cooperativa de trabajo para los abandonados de Gatic fue el primero en pararse y decir: “yo voy ahora, ¿Quién me acompaña?.. No tengo nada que perder!”, dijo convencido y emprendió ese duro camino.
Ella pide apoyo político. El sabe bien lo que es remar contra la corriente. Ocupación. Represión. Indiferencia. Condena Social. Convencimiento y una lucha que no se pierde porque no se abandona.
Hoy se ven cara a cara. La Argentina que se empeña en repetirse, las malas políticas, los sinceramientos económicos y el capital que tiene menos corazón de Pinocho, los vuelve a acorralar. Él, resiste en cooperativa junto a sus compañeros tras ese largo y duro camino. Ella se está animando a transitarlo.
“Lo único que tengo para decirte es que el camino es duro, pero vale la pena. No hay un día en que yo no tenga ganas de venir a la fábrica, antes, con el patrón, no me pasaba” le dice él. “Yo no quiero más Dass en mi vida, quiero ser mi propio jefe” se convence ella. “Es duro, pero cada día estoy más convencido de que es el camino correcto” ratifica él. Ella agradece que la acompañen a transitarlo.
Él tiene lágrimas en los ojos. Ella también.
Emociona verlos juntos. Aunque hubiera deseado que la Argentina no los hubiera juntado.Walter Ditrich es director del semanario Reflejos, de Pigüe