Empresas recuperadas y gestionadas por sus trabajadores y trabajadoras, en el eje del debate
Se llevó a cabo el penúltimo encuentro del ciclo de charlas en el marco del décimo aniversario de la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo (CNCT).
En un contexto en el que los caminos se cierran cada vez más para las y los trabajadores, las empresas recuperadas que fueron puntapié e insignia de lucha hace algunos años atrás, también se ven atravesadas por la crisis que gestionó y fomentó el gobierno neoliberal.
Con este marco no muy prometedor, se realizó el encuentro de trabajadores de empresas recuperadas de diversos rubros. Del panel participaron José Sancha, de la Cooperativa de Trabajo Decosur Ltda., primer presidente de CNCT; Federico Tonarelli, de la Cooperativa de Trabajo Buenos Aires Una Empresa Nacional Ltda. (B.A.U.E.N.); Claudia Moreno, de la Cooperativa de Trabajo Mundo Nuevo Ltda.; Fabio Resino, de la Cooperativa de Trabajo La Ciudad Ltda.; Hugo Cabrera, de la Cooperativa de Trabajo Obrera Gráfica Campichuelo (C.O.G.Ca.L.) Ltda.; Francisco Martínez, de la Cooperativa de Trabajo Textiles Pigüé Ltda.; y Jorge Reisch, de la Cooperativa de Trabajo Cueroflex Ltda. y del Sindicato de Obreros Curtidores.
Allí, con firme compromiso se plantearon estrategias de articulación y el desafío de generar unidad dentro de las diversas corrientes que tiene el sector.
Federico Tonarelli hizo las veces de moderador del panel. Antes de comenzar la ronda de exposiciones, a modo de reflexión se refirió a los diez años de la CNCT, y lo que esto significa. “Hace diez años nos encontrábamos frente al desafío de lograr lo que muchísimos cooperativistas de trabajo no habían podido logran en décadas, que era conformar una organización que nos represente a todos. Finalmente hicimos algo que debemos reivindicar y con mucho orgullo tenemos que llevar adelante, que es haber conformado finalmente aquella organización que es la CNCT. Diez años después, estamos acá, en nuestra casa y listos para seguir trabajando y haciendo crecer al cooperativismo de trabajo”.
Enseñanza hacia adentro y hacia afuera
En primer término tomó la palabra Claudia Moreno, quien hizo un repaso histórico de la creación y constitución de la Cooperativa educativa Mundo Nuevo, que se encuentra en el barrio porteño de Villa Crespo. Después del quiebre y refundación en 2007, hoy tiene 300 alumnos y 75 asociados y asociadas. Moreno, teniendo en cuenta su experiencia propia no solo en el proceso de recuperación sino también en los años que viene construyendo y aportando al crecimiento de su cooperativa, hizo especial hincapié en la necesidad de desarrollar y profundizar al interior de las entidades un lazo más fuerte “para que realmente pueda surgir un espíritu de pertenencia, identificación, identidad, participación. Si queremos más democracia, creo que el camino es ese”.
Entre las dificultades actuales, una de las más difíciles de afrontar es la económica y la edilicias, ya que no cuentan con edificio propio y tienen un gasto muy grande de alquiler. Sin embargo, redobló la apuesta: “La autogestión la entendimos como esa posibilidad de salir a pelear lo que es nuestro”.
Jorge Reisch hizo un diagnóstico crítico de la situación: “Estamos muy mal, esto no lo vivimos nunca”, afirmó con el dato certero de que las fábricas están funcionando con un 40 por ciento de su capacidad instalada y operativa. “Hacemos 50 toneladas mensuales cuando antes hacíamos 120, 130 trabajando tranquilos”.
A su turno, “Manteca” Martínez explicó que el desafío no es solamente organizar y conducir a las empresas sino también ser solidarios y estar a disposición en todo el territorio nacional para quienes están en una situación difícil. “Nosotros no podemos permitirnos más la situación de lo que provocan estos contextos en la fragmentación familiar, después en lo que tiene que ver con esta cacería a la industria argentina”, afirmó.
José Sancha hizo referencia a la crisis que se vivió en la Argentina en 2001, reivindicó al movimiento de empresas recuperadas que pudo perdurar en el tiempo y, en el caso de su cooperativa, con un crecimiento exponencial durante el gobierno kirchnerista. Todo esto, aclara, “con un contexto de políticas que favorecieron a la clase trabajadora”, marcando una clara diferencia con la actualidad donde también “la crisis es diferente a la que (le) hicimos frente en aquellos años”, explicó.
“Hoy las pymes no dan más y sin embargo como cooperativistas y como empresas recuperadas no sé si estamos en condiciones de dar aquellas respuestas que dimos en el 2001, creo que cambia la situación económica y cambia la sociedad. Hoy, la sociedad no es como la de aquel entonces, sacudida y dispuesta a votar por ejemplo leyes de expropiación, o una sociedad dispuesta a rearmar la cadena de pagos, hoy el mercado está agresivo y la sociedad está en otra situación”, destacó.
La unidad como desafío
Y no solo se habla aquí de unidad del peronismo para terminar con el gobierno de Macri en las elecciones, sino dentro del propio sector autogestivo, con ejes de comercialización, políticas, capacitación y sentido de pertenencia como un nuevo desafío hacia adelante. Es un punto en el que coincidieron todos los participantes del panel.
Hugo Cabrera sugirió hacer una mesa en la cual “más allá de las diferencias que haya, podamos sentarnos todas las organizaciones a charlar, conversar y a empezar a armar una propuesta inteligente para poder desarrollarla hacia adelante”, con puntos para trabajar (ver abajo).
En este punto, Fabio Resino llamó a “generar espacio de solidaridad y unión” con todos los actores de la economía social, “con compañeros que producen alimentos orgánicos, textiles, gráficas y otras experiencias que antes no existían hace más de diez años atrás cuando nosotros formamos la CNCT, incluso no existía este tipo de organización”. En ese aspecto, rescató a la confederación como “herramienta para discutir fuertemente una alianza y una profundización con otros sectores de la economía social de unión y de debate de toda la economía social”.
“Si estamos pidiendo unidad a los sectores políticos, deberíamos hacerlo primero nosotros para formar un grupo homogéneo que pueda poner a los mejores cuadros de cada organización en los lugares estratégicos. Creemos firmemente que ya es verdaderamente la hora de las y los trabajadores en los puestos de decisión que justamente van a entender a compañeros y compañeras que se dedican a la producción y a la industria”, afirmó Martínez.
Sancha agregó además la necesidad de pensar estas estrategias teniendo en cuenta la renovación de cuadros en las organizaciones.
Puntos de una agenda común (propuestos por Hugo Cabrera)
● Eficiencia en la gestión: que se asegure una actividad que sostenga la calidad de vida de los integrantes de una cooperativa y que ese trabajo le garantice un mínimo nivel de ingreso y sostenimiento en el futuro.
● Democracia en el lugar de trabajo: que asegure la horizontalidad de las decisiones estratégicas y la capacidad colectiva de tomar esas decisiones organizativas.
● Formación y capacitación: que consoliden los valores de la autogestión y el sentido de pertenencia.
● Herramientas de planificación: para corto, mediano y largo plazo.
● Desarrollar una estrategia de comercialización para trabajar en función de desarrollar estrategias en el intercambio propio y en la posibilidad de vender al exterior.
● Mejoramiento tecnológico.
● Estrategia de financiamiento autónomo para fortalecer al sector que genere también independencia del estado.
● Discutir nuevas políticas públicas.
● Articulación con la economía popular que no necesariamente desarrollan una dinámica autogestiva.
● Vínculo con los sindicatos.
Fuente: Prensa CNCT.