La obra que no fue

El sábado 22 de junio estaba todo listo para que reabriera sus puertas la sala teatral del Hotel Bauen, con el estreno de la obra “Yo, Feuerbach”, pero el gobierno de la Ciudad prohibió su apertura.

Muchas personas estaban a la expectativa de la reapertura de la sala de este mítico hotel, una sala donde pasaron muchas obras de gran envergadura. Lejos de poder disfrutar de una nueva obra como la que se iba a estrenar (“Yo, Feuerbach) -producida por la Cooperativa de Trabajo El Descubridor Ltda.-, tuvieron una arremetida más por parte del gobierno de Cambiemos que notificó, a horas de la inauguración, la prohibición de la apertura de la sala e intimidación a suspender la función.

A raíz de lo ocurrido cooperativistas del Hotel Bauen y de Cooperativa El Descubridor convocaron a conferencia de prensa en el auditorio Simón Bolívar. En primer término la Madre de Plaza de Mayo Taty Almeida brindó su apoyo: “Una vez más los estamos acompañando ante esta cosa que no es insólita porque no nos extraña para nada las medidas que sigue tomando Macri y compañía. Una sala de teatro que iban abrir Manolo Callau con otros cooperativistas, iban a abrirla, iban a dar fuentes de trabajo. ¡Iban a abrir una sala de teatro! ¡Cuando se están cerrando tantas! ¡Ante tantos despidos! O sea que no se extraña tanto uno que Macri y compañía sigan violando los derechos humanos, porque el derecho al trabajo, vaya, que es un derecho humano”.

Luego, el vicepresidente de la Cooperativa de Trabajo Buenos Aires Una Empresa Nacional (B.AU.E.N.) Ltda., Federico Tonarelli, explicó detalladamente la lucha que viene llevando la empresa recuperada y el porqué de la prohibición de la apertura de la sala. La notificación está basada “sobre unas sucesivas clausuras que hemos recibido en los últimos tiempos, ni más ni menos que por esto: como todos saben tenemos el litigio interminable de 16 años por la posesión legal del edificio”.

Detalló que “la justicia pretende restituir el inmueble a sus dueños originales, ahora, detrás de una nueva razón social que se llama Mercoteles S.A. y disolver la Cooperativa para entregarles el edificio a ellos una vez más. ¿Quiénes son? Ni más ni menos los que lo construyeron en épocas de la dictadura con un crédito impago. 41 años después los mismo que lo vendieron de manera simulada dos veces y los que ahora pretenden la restitución del edificio a partir de la justicia”, expuso el cooperativista.

Cuando finalmente parecía que la lucha estaba ganada por una ley que se aprobó en ambas cámaras para que el Estado expropiara del inmueble y otorgara en comodato a la Cooperativa Bauen para poder seguir usufructuándolo, el presidente de la Nación Mauricio Macri vetó la ley.

Tonarelli agregó: “La ley nunca planteó que nos regalaban el edificio y el macrismo se encargó de decir que esto era una barbaridad para fundamentar el veto del presidente ‘¿Cómo se podía regalar un edificio de millones de dólares a unas pocas personas?’, se preguntaban algunos de sus voceros como el senador Pinedo”.

Al finalizar aclaró que la notificación se basó en las clausuras que vienen sufriendo, “por no tener la tenencia del edificio nos impidieron abrir un espacio más”.

A su turno, el presidente de la Cooperativa El Descubridor, Manuel Callau, se refirió a la Cooperativa como manera de organizar solidariamente a los seres humanos para generar trabajo: “Pensamos que hace falta construir herramientas que pongan en funcionamiento lo mejor que cada uno de nosotros tiene, no la competencia, no el lucro, hay otros valores que están presentes”.

Luego, se lamentó por no poder presentar la obra pero aseguró que van a poner en funcionamiento la sala pequeña que se iba a inaugurar este sábado y además que van a seguir con las obras del teatro que se encuentra en la planta superior del hotel y que cuenta con 280 localidades. «Aunque ya nos quedamos sin dinero, nosotros pensamos que en dos meses con mucho esfuerzo lo vamos a poner en funcionamiento y tenemos programación como para llegar a la gente”, concluyó.

Al finalizar se decidió hacer una visita al teatro, sin actores, pero como símbolo de lucha para seguir adelante.

Fuente: Prensa CNCT.